Puntos de cierre
El herraje permite la fijación de la hoja al marco mediante los puntos de cierre. Estos son los que garantizan la estanqueidad del cerramiento, así como el nivel de seguridad de la ventana.
El cierre perimetral de ambas hojas nos asegura que las prestaciones de la ventana van a permanecer inmutables durante la vida útil de la ventana.
Los cerraderos del herraje Titan AF de Siegenia están compuestos de acero en las zonas donde deben prestar seguridad y un material plástico (GFK) en las zonas de rozamiento, esto evita el desgaste y garantiza un deslizamiento suave a lo largo del tiempo.
Puntos anti-palanca
Todos los cerraderos del marco ayudan al correcto funcionamiento de la ventana. Además de esto, ofrecen cierta seguridad ante cualquier intento de forzar nuestra vivienda.
Los puntos anti-palanca están especialmente diseñados para proteger nuestro hogar de la forma más común de forzado de las ventanas.
Gracias a estos elementos de seguridad activa se evita que se pueda acceder a los bulones de la ventana desde el exterior de la vivienda, previniendo, de este modo, los intentos de efracción de nuestro cerramiento.
Elevador de hoja
Con el paso del tiempo el peso de las hojas puede hacer que las bisagras sufran en exceso y acaben desplomando las hojas y funcionando incorrectamente.
Los elevadores de hoja evitan que el peso de las hojas recaiga completamente sobre las bisagras, aumentado y mejorando la vida útil de la ventana.
Para hacer esta función uno de los cerraderos inferiores dispone de un soporte sobre el que descansa cada hoja, de forma que el peso de esta se transmite al marco y permitiendo descansar a las bisagras mientras la hoja está cerrada.
Anti-falsa maniobra
La anti-falsa maniobra es un mecanismo que evita que la ventana abra en su posición de practicable y oscilante a la vez.
Debido a la posibilidad que tienen las ventanas oscilobatientes de abrir en dos posiciones distintas, en alguna ocasión se pueden activar los dos movimientos a la vez. Esto hace que el herraje sufra innecesariamente y, además, da al usuario una sensación incómoda ya que parece que la hoja se le abalanza encima.
Para conseguir esto, cuando la hoja está abierta en cualquier posición, el sistema de anti-falsa maniobra bloquea el movimiento de la manilla, evitando de esta forma que accionemos el herraje.
Dentado fino
Un herraje completo se compone de gran cantidad de partes y estas deben unirse mediante un sistema de dentado. Este dentado transmite el movimiento entre las diferentes partes y por lo tanto está sometido a altas tensiones.
El uso natural del herraje puede ocasionar que estos “dientes” salten, produciendo una desregulación en el herraje que puede ir aumentando con el paso del tiempo.
Para evitar esto, utilizamos herraje con dentado fino que mejora el comportamiento de este al uso, garantizando un herraje siempre en buen estado.
Placas anti-corrosión
Para adaptar el herraje a las medidas de la ventana, algunas piezas deben ser cortadas. Este corte provoca que la capa protectora de las piezas se pierda en la zona cortada, permitiendo la corrosión del herraje con el paso del tiempo.
Para proteger los cortes, las uniones de las diferentes piezas cortadas están protegidas por una placa galvanizada de alta resistencia a la corrosión que tapa la unión evitando la exposición de este a los agentes corrosivos.
Ayudas a cierre compás
El uso más común de las ventanas es la ventilación de la vivienda y para esto se suelen poner en posición oscilante. Este movimiento continuo puede hacer que el compás sufra con el paso del tiempo y termine cerrando de forma forzada.
Con la inclusión de un pequeño sistema de guía en el compás, se favorece el cierre de este, haciendo que su último movimiento sea más suave y aumentando su durabilidad.